El secretario Marco Rubio estuvo de visita en México la semana pasada. En las declaraciones públicas, protocolarias, todo fue miel, todo fue dulce. "Es la cooperación más estrecha que hemos tenido nunca, quizá entre cualquier país, pero sin duda entre Estados Unidos y México", dijo Rubio al despedirse.
El día antes de su visita, publiqué un post pidiéndole a Marco que no nos olvidara cuando se sentara con la muy simpática señora. Que no nos olvidara a los cubanos, ya que ella y su mentor no son aliados de Estados Unidos, sino de Maduro y los Barrigones.
Me encabrona porque seguramente leyó el post, pero no me hizo caso.
No llegaba el avión del secretario a la altura de crucero, después de despegar del fracasado aeropuerto que Andrés Manuel López les metió a pepe a los mexicanos, cuando la señora Claudia ya estaba contratando a otros dos mil médicos esclavos.
Demostrando el grado de respeto que les tienen a esos productos del sistema totalitario impuesto en Cuba, estos supuestos médicos no irán a trabajar en hospitales especializados o clínicas de prestigio. No, como en Venezuela con Barrio Adentro, los cautivos irán a zonas de alta marginación.
A zonas de alto peligro, regiones controladas por los cárteles dueños de la mitad del país desde los "abrazos no balazos" de AMLO. Total, si Cuba entera es una zona de alta marginación y controlada por una narcojunta, estos médicos se sentirán como en casa.
Desde 2022, en tiempos de AMLO, el gobierno de México, con dinero de todos los mexicanos, ha engordado a los Barrigones con 100 millones de dólares por pago al trabajo esclavo de los supuestos médicos de la isla.
De esos millones de dólares los infelices verán solo algunos miles. El Parlamento Europeo calificó a estas "misiones" como "formas modernas de esclavitud".
Es por ello por lo que el Departamento de Estado, a cargo de Rubio, ha retirado las visas para entrar a Estados Unidos a funcionarios de Brasil, Granada y varios países africanos. "Este plan enriquece al corrupto régimen cubano al tiempo que priva al pueblo cubano de atención médica esencial", dijo el secretario.
Pues bien, a pesar de haberse leído, seguramente, mi post, Marco no quitó ni una sola visa en México. Por eso, Claudia, me imagino que burlonamente, siguió contratando esclavos a los Barrigones.
Con Marco todo fue amabilidad, pero en la práctica lo desprecian e ignoran. Les he contado que solo entre mayo y junio de este 2025, Pemex, que es "de todos los mexicanos", ha despachado para los parásitos Barrigones que oprimen a la cautiva treinta y nueve buques cargados de combustible. Ochocientos cincuenta millones de dólares, equivalentes a 15 810 millones de pesos mexicanos.
¿No se dan cuenta? México ha estado contratando médicos esclavos de los Panzones, enviando repetidamente embarques regalados de combustible a los Barrigones y financiando plataformas de propaganda antinorteamericana.
Se dicen amigos de Estados Unidos, pero no lo son. Son amigos del mal.
Esperemos, a pesar de las dulces declaraciones, que Marco, y su jefe, sí se hayan dado cuenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario